En este paciente realizamos un tratamiento integral de armonización facial. Se abordaron diferentes áreas estratégicas del rostro para lograr un resultado equilibrado y natural. Trabajamos la región cigomática y el área malar para aportar volumen y estructura, así como el surco nasogeniano para suavizar líneas de expresión marcadas.
En la parte inferior del rostro, se definió el contorno mandibular mediante una simulación de masetero, se corrigió la proyección del mentón y se perfeccionaron las transiciones faciales.
El tratamiento incluyó también el marcaje mandibular y el realce de las líneas de la sonrisa, logrando un resultado armónico y rejuvenecido.

En este caso, la paciente se sometió a un tratamiento enfocado en la mejora del perfil facial. Se trabajó la proyección del mentón, se realizaron ajustes estéticos en los labios y se perfeccionó la forma de la nariz.
El objetivo fue lograr un equilibrio armónico entre los elementos del rostro, destacando una silueta facial más estilizada y definida.